29 de Diciembre de 1954
TÍTULO ORIGINAL
Animal Farm
DIRECCIÓN
John Halas, Joy Batchelor
PRODUCCIÓN
John Halas, Joy Batchelor
GUION
John Halas, Joy Batchelor, Borden Mace, Philip Stap, Lothar Wolff
John Halas, Joy Batchelor, Borden Mace, Philip Stap, Lothar Wolff
Basado en la novela de George
Orwell
REPARTO
Gordon Heath (Narrador), Maurice
Denham (Todos los animales)
CINEMATOGRAFÍA
Inaplicable
BANDA SONORA
Matyas Seiber
DISTRIBUCIÓN
Louis de Rochemont Associates
Louis de Rochemont Associates
DURACIÓN
72 minutos
72 minutos
CERDO MAYOR: “¿Es acaso esta
granja demasiado pobre para mantenernos? No, camaradas, la Granja Manor es
rica. Nunca recibiremos nuestra parte de manos del patrón. Derroquemos al
tirano y seremos libres. Camaradas… ¡Revolución! Pero recordar, cuando os
hayáis librado de Jones, no adoptéis sus vicios. Nosotros los animales somos
hermanos, grandes o pequeños, inteligentes o simples, con pelo o con pluma,
ahora y siempre, todos los animales son iguales.”
GORDITO PUÑO: “Yo estuve con él
hasta el final. Camaradas, sus últimas palabras fueron estas: ‘larga vida a
Napoleón’. En cuanto al rumor de que Bóxer ha sido vendido a la fábrica de
cola, nuestro líder no haría tal cosa. ¡Viva Napoleón! ¡Viva
Napoleón!”
NARRADOR: “Y esa noche, los
cerdos brindaron por la memoria de Bóxer con el whiskey que les dieron a cambio
de su vida.”
NAPOLEÓN: “Mis leales seguidores,
en las granjas administradas por los cerdos hay orden y disciplina. Nuestros
animales trabajan más y comen menos que en otras granjas. Esto les animará a
hacer trabajar más a sus animales y comer menos, y a construir una granja
animal mayor. Por la paz y la abundancia bajo el dominio de los cerdos.”
La película está basada en la novela del mismo título
escrita por George Orwell, y publicada en el año 1945. Orwell se inspiró en la
transición de la Revolución Rusa de 1917 hasta la época Estalinista de la Unión
Soviética. Como socialista demócrata, Orwell era muy crítico con Joseph Stalin.
La película fue la primera producción animada del Reino Unido en ser estrenada
en el cine. Otras dos películas, tituladas “Water for Firefighting” (1945) y
“Handling Ships” (1942), habían sido producidas previamente pero no habían sido
distribuidas en cines.
La CIA se hizo con los derechos de la novela de George
Orwell tras su fallecimiento, y a través de su viuda Sonia Orwell. La CIA
también financió el proyecto en secreto, con la intención de que fuera
propaganda anticomunista. Algunas fuentes aseguran que el final de la película
también fue alterado por la CIA, ya que en la novela los cerdos y los humanos
terminaban estableciendo una alianza formal. De esta forma en la película se
optó porque los animales de la granja observaran como los cerdos habían
adquirido los hábitos de los humanos, siendo cada vez más parecidos, y así
presionar más sobre el mensaje anticomunista. El final también adoptó un
espíritu más esperanzador mostrando como los animales acababan con la tiranía
de los cerdos, entre otras cosas para que fuera más del gusto de los
espectadores y más optimista. Sin embargo, no se recalcó el aspecto oscuro de
la película a la hora de anunciarla, y algunos padres se quejaron al llevar a
sus hijos, considerándola demasiado violenta y con un mensaje difícilmente
entendible para ellos.
El historiador de animación Brian Sibley ha declarado
dudar que el equipo responsable de producir la película supiera que la CIA lo
estaba financiando. Dicha agencia tuvo gran influencia sobre la producción de
la película, como a la hora de alterar el final pesimista de la novela. También
pusieron énfasis en que el mensaje transmitiera que el régimen de Stalin no era
tan malo como el del granjero Jones, sino peor y más sádico. De igual forma
habría que mostrar que Napoleón no era solo tan malo como Jones, sino mucho
peor. El propio Orwell había declarado que si el personaje de Bola de Nieve no
hubiera sido derrocado por Napoleón, el destino de los animales no habría sido
mejor. Usando el molino de viento como ejempló, Orwell explicó que Bola de
Nieve habría gastado demasiado tiempo y recursos en otros proyectos faraónicos
hasta que la granja habría acabado en la bancarrota. La CIA mostró su
preocupación ante la posibilidad de que el personaje de Bola de Nieve, que
representaba a Trotsky, se mostrara demasiado amable y se sugiriera que era
inteligente, dinámico y valiente.
Los primeros borradores del guion reflejaban esto, y la CIA declaró que no se debía consentir. Se envió un memorándum al equipo de producción explicando que el personaje debía ser mostrado como un fanático intelectual, cuyos planes provocarían igual desastre a largo plazo.
Los primeros borradores del guion reflejaban esto, y la CIA declaró que no se debía consentir. Se envió un memorándum al equipo de producción explicando que el personaje debía ser mostrado como un fanático intelectual, cuyos planes provocarían igual desastre a largo plazo.
Halas y Batchelor fueron contratados para realizar el
proyecto en noviembre de 1951, y lograron completarlo en abril de 1954,
contando con un equipo de alrededor de ochenta animadores. La crítica se mostró
a favor de la película, no solo por el tono y por el mensaje, sino también
alabando el trabajo de Denham, que había proporcionado su voz para todos los
personajes. Un sector de la crítica se mostró en contra del final optimista,
alegando que a Orwell no le habría gustado su sustitución de propagada
corriente por su propia sátira melancólica. A la película le llevó un total de
quince años para recuperar su presupuesto inicial, logrando recaudar beneficios
cinco años después de esto. En 1999, se produjo otra película de acción real,
con actores y animales reales, siendo estos últimos modificados mediante
efectos especiales para poder hablar.
La película fue mucho más dulcificada, y se la considera como una versión muy pobre sobre todo comparándola con la película animada.
La película fue mucho más dulcificada, y se la considera como una versión muy pobre sobre todo comparándola con la película animada.
Siempre he considerado que toda propaganda tiene un doble filo, al
poder ser sujeta a múltiples interpretaciones. Las intenciones de Orwell son
claras a la hora de criticar el comunismo de la entonces Unión Soviética,
aunque estoy de acuerdo en que tiene un espíritu considerablemente pesimista.
Pude ver la película por primera vez cuando estaba en la universidad a mediados
de la década de 1990. Mi primera impresión fue la de discernir una historia que
mostraba la fragilidad de cualquier sistema democrático, fuera del origen que
fuera. Las intenciones de los animales son buenas, pero basta un pequeño grano
de maldad, ambición desmedida, o corrupción para que todo se vaya al traste.
Uno puede fijarse en el personaje de Napoleón, diseñado para ser detestable
desde el principio. Sin embargo, recuerdo preguntarme por qué si los animales
eran mucho más numerosos, no eran capaces de derrocar al tirano, de la misma
forma que habían hecho con el granjero.
La escena en la que se llevaban al caballo Bóxer para ser
sacrificado me parece una de las más duras que he podido ver en la historia de
la animación. Pero tal y como he mencionado antes también señala la ingenuidad
de los animales, que tras ser explotados y presenciar ejecuciones, siguen
confiando en lo imposible. Tras ver la película, procedí a leer la novela,
mucho más dura en mi humilde opinión. Curiosamente apoyo más el final de la
película, no solo por su optimismo, sino también porque prefiero la idea de los
cerdos convertidos en humanos, por encima de su alianza con humanos como
mostraba la novela. Al margen de todo
esto, la película me parece un gran trabajo de animación que no ha envejecido
con el paso del tiempo.
HISTORIA (esta sección contiene detalles de la trama y el
argumento)
Ha llegado la primavera, pero en la Granja Manor impera una gran
tristeza. En el pasado, la granja había sido muy prospera pero el Señor Jones,
propietario de la granja, acabo dándose a la bebida y la pobreza imperó en la
granja. Una noche, Jones regresa borracho a la granja, maldiciendo a los
animales que le salen demasiado caros, y lanzando una botella a un perro. Una
vez el propietario se acuesta, los animales se reúnen en el establo convocados
por el Cerdo Mayor, el más sabio de todos los animales de la granja. Los
cerdos, el caballo Bóxer y el burro Benjamin, son algunos de los muchos
animales que acuden a la reunión. Entre los cerdos se encuentran los ambiciosos
Bola de Nieve y Napoleón. Al encontrarse ya envejecido y enfermo, Mayor se
dirige a los animales. Explica que todo lo que los animales producen les es
arrebatado, y vendido, y que el destino es aciago para todos. Mayor propone
derrocar al tirano Jones llevando a cabo una revolución para así ser libres.
Sin embargo, también les advierte que una vez se libren de Jones, no deben
adoptar sus métodos y que todos los animales deben ser iguales.
Al acabar su discurso, Mayor cae muerto. Jones se despierta por el alboroto de los animales, y realiza un disparo para que se dispersen. Los animales abandonan el establo, dejando el cuerpo muerto de Mayor atrás.
Al acabar su discurso, Mayor cae muerto. Jones se despierta por el alboroto de los animales, y realiza un disparo para que se dispersen. Los animales abandonan el establo, dejando el cuerpo muerto de Mayor atrás.
A la mañana siguiente, Jones se olvida de dar de comer a los
animes, que deciden entrar en el granero para poder comer. Al descubrirles, Jones
fustiga a varios cerdos y ovejas provocando la ira de los animales, que se
enfrentan al granjero provocando que salga despavorido hacia el pueblo. Jones
recluta a varios hombres y regresa a la granja para someter a los animales,
pero estos se unen y les derrotan tras una dura batalla. Los animales proceden
a destruir todo objeto que les recuerde al Señor Jones, como sus armas, y
objetos utilizados contra ellos. Los animales entran a examinar la casa de Jones,
y deciden que no es lugar para ellos. Sin embargo, el cerdo Napoleón decide
ocupar la casa, encargándose de unos cachorros de perros huérfanos en secreto.
Bola de Nieve reúne a los animales para establecer leyes por las que regirse.
Los animales se enfrentan a la dificultad de llevar la granja,
pero los cerdos a menudo tienen buenas ideas para salir adelante. Los animales
consiguen con éxito almacenar toda la cosecha necesaria durante cinco meses, y
se reúnen en asamblea para hablar del futuro. Bola de Nueve propone que corran
la voz sobre su éxito a otras granjas, para que también se rebelen. En algunas
granjas tienen lugar algunas rebeliones, aunque en otras los animales se
contentan con su vida. Bola de Nieve enseña a los animales a leer, contar, y
escribir. Los cerdos ocupan los lugares de poder más relevantes, adquiriendo
más comida como recompensa a su inteligencia y esfuerzos. A la llegada de enero
y el mal tiempo, surge el primer problema de escasez. Bola de Nieve prepara un
nuevo plan para la granja, que proporcionará electricidad a la granja. Habrá
que comer menos y trabajar más, pero en un año el esfuerzo dará sus frutos.
Napoleón se muestra en contra y utiliza a los ya crecidos perros para matar a
Bola de Nieve.
Napoleón asume el liderazgo de la granja, asegurando que Bola de
Nieve pretendía traer a Jones de vuelta, y pone fin a las asambleas, tomando
todas las decisiones.
Napoleón presenta el proyecto del molino de viento de Bola de Nieve como suyo propio. Bóxer es esencial en el proyecto, en el que trabajan todos los animales mientras los cerdos se limitan a dar órdenes y reciben más comida. Una noche, Bóxer y Benjamin descubren a los cerdos durmiendo en la casa de Jones, y la noticia se extiende por toda la granja. Los animales descubren que la ley que prohibía esto ya ha sido cambiada, y otras muchas leyes van modificándose para beneficio de Napoleón y los cerdos. Jones comenta a otros hombres de la taberna local, que la escasez provocará el fracaso de los animales. La conversación es escuchada por el comerciante Señor Whymper, que acude a la granja para iniciar negocios con Napoleón. Este recibe un suministro de mermeladas y gelatinas, y promete entregar los huevos de las gallinas. Al descubrir esto, las gallinas se rebelan y lanzan huevos contra los cerdos cuando intentan arrebatárselos. Los perros acaban con la rebelión y Napoleón celebra un juicio contra las gallinas, acusándolas de traición.
Una oveja y una oca también reconocen haber participado en la rebelión. Los animales de la rebelión son ejecutados por los perros, y a la ley de que ningún animal matara a otro se le añade “sin motivo”. Napoleón prohíbe la canción de la revolución, asegurando que ha concluido y que castigará a quien la cante. El comercio entre la granja y el exterior se incrementa, haciendo a Whymper cada vez más rico. Enfurecidos, los hombres del pueblo deciden atacar a la granja, pero sin contar con Jones al considerarle acabado. Esto le enfurece de nuevo y decide acudir al molino de la granja para destruirlo con dinamita. Los animales se enfrentan a los humanos y consiguen derrotarles, sufriendo numerosas bajas y perdiendo el molino en la explosión. Bóxer es herido en una pata pero pone todo de su parte para la reconstrucción del molino, mientras los cerdos se atiborran en la antigua casa de Jones. Agotado, Bóxer no puede trabajar más y Benjamín le tranquiliza asegurándole que se ha ganado su retiro por todo su esfuerzo. Una ambulancia llega para llevar a Bóxer a una recuperación, pero los animales se dan cuenta de que se trata del furgón de la muerte de la fábrica de cola de Whymper. A cambio de Bóxer, que perece en la fábrica, los cerdos reciben un suministro de alcohol.
Los cerdos mienten asegurando que Bóxer pereció de sus heridas, siendo un rumor que fue entregado a la fábrica de cola, y que sus últimas palabras fueron larga vida a Napoleón. Benjamin no cree nada esto, pero los perros meten a todos los animales en vereda. Por la noche, los cerdos brindan con el whiskey obtenido a cambio de la vida de Bóxer.
Napoleón presenta el proyecto del molino de viento de Bola de Nieve como suyo propio. Bóxer es esencial en el proyecto, en el que trabajan todos los animales mientras los cerdos se limitan a dar órdenes y reciben más comida. Una noche, Bóxer y Benjamin descubren a los cerdos durmiendo en la casa de Jones, y la noticia se extiende por toda la granja. Los animales descubren que la ley que prohibía esto ya ha sido cambiada, y otras muchas leyes van modificándose para beneficio de Napoleón y los cerdos. Jones comenta a otros hombres de la taberna local, que la escasez provocará el fracaso de los animales. La conversación es escuchada por el comerciante Señor Whymper, que acude a la granja para iniciar negocios con Napoleón. Este recibe un suministro de mermeladas y gelatinas, y promete entregar los huevos de las gallinas. Al descubrir esto, las gallinas se rebelan y lanzan huevos contra los cerdos cuando intentan arrebatárselos. Los perros acaban con la rebelión y Napoleón celebra un juicio contra las gallinas, acusándolas de traición.
Una oveja y una oca también reconocen haber participado en la rebelión. Los animales de la rebelión son ejecutados por los perros, y a la ley de que ningún animal matara a otro se le añade “sin motivo”. Napoleón prohíbe la canción de la revolución, asegurando que ha concluido y que castigará a quien la cante. El comercio entre la granja y el exterior se incrementa, haciendo a Whymper cada vez más rico. Enfurecidos, los hombres del pueblo deciden atacar a la granja, pero sin contar con Jones al considerarle acabado. Esto le enfurece de nuevo y decide acudir al molino de la granja para destruirlo con dinamita. Los animales se enfrentan a los humanos y consiguen derrotarles, sufriendo numerosas bajas y perdiendo el molino en la explosión. Bóxer es herido en una pata pero pone todo de su parte para la reconstrucción del molino, mientras los cerdos se atiborran en la antigua casa de Jones. Agotado, Bóxer no puede trabajar más y Benjamín le tranquiliza asegurándole que se ha ganado su retiro por todo su esfuerzo. Una ambulancia llega para llevar a Bóxer a una recuperación, pero los animales se dan cuenta de que se trata del furgón de la muerte de la fábrica de cola de Whymper. A cambio de Bóxer, que perece en la fábrica, los cerdos reciben un suministro de alcohol.
Los cerdos mienten asegurando que Bóxer pereció de sus heridas, siendo un rumor que fue entregado a la fábrica de cola, y que sus últimas palabras fueron larga vida a Napoleón. Benjamin no cree nada esto, pero los perros meten a todos los animales en vereda. Por la noche, los cerdos brindan con el whiskey obtenido a cambio de la vida de Bóxer.
El molino es reconstruido, los años pasan y Napoleón ha expandido
las granjas vecinas para crear una gran empresa. Cerdos embajadores de otras
granjas acuden a la de Napoleón para celebrar una gran convención y tomar
decisiones. Deciden cambiar la ley dictando que “todos los animales son iguales
pero algunos son más iguales”. Los cerdos comienzan a parecerse a los humanos,
caminando sobre dos patas, usando látigos y usando ropa. Napoleón reúne a los
cerdos para felicitarles por tener los animales que más trabajan y menos
consumen del país. Tras esto, brinda por un futuro en que todas las granjas del
mundo sean dominadas por los cerdos. Estos cambios son comunicados a otras granjas
a través de Benjamin, ya envejecido y agotado, pero dispuesto a cambiar las
cosas.
Los animales deciden rebelarse contra los cerdos, responsables de
la muerte de Bola de Nieve, Bóxer y otros muchos animales. Napoleón intenta
convocar a los perros para que ataquen a los animales, pero están demasiado
borrachos. Los animales encabezados por Benjamín irrumpen en la casa de Jones,
donde pisotean y aplastan a los cerdos hasta la muerte, recuperando el control
de la granja. Benjamin se mantiene serio ante este éxito.
ESCENA
Aquí dejo el tráiler de la película, ya que no he encontrado
escenas individuales.