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miércoles, 1 de julio de 2020

TIBURÓN 3: EL GRAN TIBURÓN

FECHA DE ESTRENO
22 de Julio de 1983
TÍTULO ORIGINAL
Jaws 3-D
DIRECCIÓN
Joe Alves
PRODUCCIÓN
Rupert Hitzig
GUION
Richard Matheson, Carl Gottlieb
REPARTO
Dennis Quaid (Michael Brody), Bess Armstrong (Kathryn Morgan), Simon MacCorkindale (Philip FitzRoyce), Louis Gossett Jr (Calvin Bouchard), John Putch (Sean Brody), Lea Thompson (Kelly Ann Bukowski), PH Moriarty (Jack Tate), Dan Blasko (Danny), Liz Morris (Liz), Harry Grant (Shelby Overman), Kaye Stevens (Señora Kellender), Lisa Maurer (Ethel), Alonzo Ward (Fred), Dolores Starling (Charlene Tutt)
CINEMATOGRAFÍA
James A Contner, Chris Condon, Austin McKinney
BANDA SONORA
Alan Parker
DISTRIBUCIÓN
Universal Pictures
DURACIÓN 
98 minutos
PRECEDIDA POR:
SUCEDIDA POR:

KAY MORGAN: “Bueno, no sé si se le ha ocurrido a alguno de ustedes, pero no hay en el mundo ningún tiburón blanco gigante en cautividad. Y este, Señor Calvin, es el lugar ideal para conseguirlo. Aquí tenemos todo lo preciso para mantenerlo con vida. Si pudiéramos inyectarle un tranquilizante, y después pasarle a un tanque…”
MICHAEL BRODY: “Oh, un momento, un momento, eso es una locura. Es absurdo. Los tiburones blancos son asesinos. Los conozco, uno atacó a mi padre, a mi hermano y a mí mismo. Son asesinos. No Kay.”
PHILIP FITZROYCE: “Calvin, muertos son todo un espectáculo.”

CURIOSIDADES
David Brown y Richard Zanuck, productores de las dos primeras películas concibieron como primera idea la tercera parte con el título de “Jaws 3, People 0”. Matty Simmons acababa de tener un gran éxito con la película “Desmadre a la Americana” (1978), motivo por el que fue reclutado como productor para el proyecto. Brown y Zanuck se convirtieron entonces en productores ejecutivos. 
Simmons delineó una historia base y contactó con los guionistas de la mencionada película, John Hughes y Todd Carroll, para que crearan un guion. Joe Dante fue considerado brevemente como director, pero el proyecto se vio cancelado debido a varios conflictos dentro de Universal Studios. David Brown declaró tiempo después que el estudio no estaba a favor de que el proyecto se convirtiera en una parodia, que dañaría la franquicia. Sin embargo, el consideraba que esa idea cómica habría funcionado perfectamente.
Alan Landsburg se hizo con los derechos para producir la película e intentó involucrar al cineasta experimental Murray Lerner. Su argumento se basaba en la idea de que la gente del parque temático Marineland en Florida, había visto su corto en 3D “Sea Dream” (1978). Sin embargo Lerner declaró quedar descorazonado al leer el guion, decidiendo que no se podía ver involucrado en dicho proyecto. Finalmente, la película fue dirigida por Joe Alves, que había sido el diseñador de producción de las dos primeras. 
De hecho, había sido el director de la segunda unidad de “Tiburón 2” (1978), y había estado a punto de ser codirector de la misma junto Verna Fields cuando el primer director John D Hancock había abandonado el proyecto. La película fue rodada en SeaWorld Orlando, un parque acuático interior, y Navarre Florida una comunidad de Florida cerca de Pensacola.
Al igual que ocurrió con las dos primeras películas, muchas personas se vieron involucradas en el guion de la película. Richard Matheson declaró haber escrito un esquema muy interesante, aunque la historia fuera luego acreditada a otro escritor. Universal Pictures obligó a Matheson a incluir a los dos hijos del protagonista de las anteriores películas, Martin Brody, en la tercera parte; aunque al escritor le pareció una tontería. También deseaban que el tiburón de la tercera parte fuera el mismo electrocutado, y que escribiera un papel específico para Mickey Rooney. A Matheson esto le parecía ridículo, ya que cuando dicho actor no logró estar disponible, toda su trama resultó no tener sentido. 
El guionista no quedó nada satisfecho del resultado final de la película. Terminaría declarando que su primera versión era muy buena y, si hubieran escogido a un buen director, podría haber acabado por ser una excelente película. Sin embargo, la tercera película de la franquicia terminó por convertirse en el único proyecto dirigido por Joe Alves. Matheson le consideraba un gran diseñador de producción, pero no opinaba lo mismo de él como director. También criticó duramente que el proyecto fuera en tres dimensiones, considerando que enturbió el resultado final y no consiguió efecto alguno adicional. Otras fuentes aseguraron que Guerdon Trueblood era el verdadero creador de historia base, pues ya había concebido una historia sobre un tiburón que nadaba en contra de la corriente para acabar atrapado en un lago. Carl Gottlieb ya se había encargado de revisar los guiones de las dos primeras películas, e hizo lo mismo con el trabajo de Matheson y fue acreditado como guionista. Matheson declaró que su guion había sido revisado por asesores de guiones. 
Durante la primera mitad de la década de 1980 existía una creciente popularidad por el cine en tres dimensiones, y varias películas decidieron usar dicha técnica. En esta ocasión se integró dicha tecnología en el título, como ya se había hecho en las terceras películas otras franquicias como “Amityville III: El Pozo del Infierno” (1983) o “Viernes 13, Parte III” (1982). El uso de la tecnología fue publicitado como “la tercera dimensión es terror”. Los espectadores usaban gafas polarizadas desechables para ver la película, que creaban el efecto de que algunos elementos del film salieran de la pantalla. Aunque la película fue un éxito de taquilla, fue vapuleada por espectadores y crítica.

NOTA PERSONAL
Sinceramente, esta es una de esas ocasiones en las que no estoy de acuerdo con la mayoría. A mí me gustó mucho esta tercera parte. 
Quizás se debiera en parte en que yo trabajaba en el delfinario de un zoológico en aquel entonces. De hecho, me pareció que el día a día de los trabajadores de un parque estaba bastante bien representada, siendo bastante agradable en temporadas de buen tiempo. Pero al margen de esto, me gustó el papel de Quaid, y que se siguiera con la saga de los Brody, aunque el personaje de Sean no fuera muy aprovechado. Es cierto que no la consideraría una película de terror, sino más bien de acción y aventuras, pero yo la disfruté mucho en su momento. No voy a negar que hay aspectos que podrían haber sido mejorados, pero he visto muchísimas catástrofes cinematográficas de la década de 1980 como para vapulearla.
En lo que sí estoy de acuerdo es en la falta de necesidad de las tres dimensiones, que además han envejecido mal y destrozado por tanto algunas escenas importantes de la película. Incluso en la actualidad, me he mostrado siempre en contra de dicha técnica, que aunque volvió a tener un auge al final de la década de 2000, ha terminado por ir desapareciendo ante el descontento de muchos.
Dicho esto, reivindicó esta película como una entretenida aventura, con personajes bastante realista, y en la que además los delfines que tanto adoro terminan por ser los verdaderos héroes.

HISTORIA (esta sección contiene detalles de la trama y el argumento)
En el parque acuático de Mundo Marino de Orlando, un grupo de artistas que actúan en una atracción de esquí acuático se encuentra practicando su número fuera del recinto del parque. Un Gran Tiburón Blanco se siente atraído por el sonido y sigue al grupo, entrando en el recinto del parque antes de que cierren la verja del recinto, que sufre un malfuncionamiento. El parque se está preparando para su inminente inauguración, y todos los últimos detalles se están revisando para que todo sea perfecto. Calvin Bouchard es el director del parque y atiende a los periodistas antes de la inauguración, anunciando que el famoso cazador y fotógrafo Philip FitzRoyce visitara el parque. Michael Brody trabaja en el parque como técnico jefe, y mantiene una relación con la bióloga marina al mando del parque, Kay Morgan, que también trabaja con mamíferos acuáticos, particularmente con delfines. 
Kay es informada que los delfines Cindy y Sandy se niegan a salir de su recinto, y no muestra preocupación por ello. FitzRoyce llega al parque esa tarde, realizando una rueda de prensa junto a Bouchard. El hermano pequeño de Michael, Sean Brody, también llega al parque para visitarle y conoce a una joven llamada Kelly. La joven trabaja en el parque como esquiadora acuática, y el flechazo entre ella y Sean es inmediato, a pesar de que el joven odia el mar como secuela del ataque que sufrió de niño. Sin embargo, Kelly consigue que nade con ella esa noche. Michael también le revela a Kathryn que ha recibido una gran oferta para trabajar en Venezuela durante año y medio, lo que pone en duda su relación. Por la noche, el mecánico Shelby Overman se sumerge para reparar la verja, y es mortalmente atacado por el tiburón. Un par de ladrones también se introducen en el parque para bucear y robar el coral de las instalaciones para venderlo. Ambos también son víctimas del tiburón. A la mañana siguiente, Michael y Kay son informados de la desaparición de Overman por parte de su enfurecida novia Charlene, que piensa que ha sido abandonada. 
Michael y Kay deciden investigar el fondo del recinto en un pequeño sumergible para averiguar si Overman ha sufrido algún accidente. Los delfines les acompañan y parecen intentar evitar que salgan del sumergible, aunque la pareja lo hace y es atacada por el tiburón. Los delfines acuden al rescate de Michael y Kay, logrando llevarles hasta la superficie y la verja del recinto de los delfines es cerrada antes de que el tiburón les siga. Michael y Kai informan a Bouchard que un tiburón de tres metros está en el parque y FitzRoyce se ofrece para cazarlo ante las cámaras como show publicitario. Sin embargo, Kay les recuerda que ningún parque tiene un tiburón blanco en cautividad, y convence a Bouchard de que a la larga será más beneficioso tener uno con cautividad. El argumento convence incluso a FitzRoyce que se une a la idea de cazarlo con vida, aunque Michael se muestra completamente en contra. Durante la noche, Michael, Kay, FitzRoyce y su ayudante Jack Tate consiguen cazar al tiburón, sedándole y colocándole en un tanque. Kai se encarga de la rehabilitación del tiburón con su compañera Liz. 
Ambas consiguen reanimar al tiburón, pero Kay decide que no está listo para ser expuesto al público todavía.
Al día siguiente, Mundo Marino abre sus puertas al público, aunque Michael continúa la búsqueda de Overman. Kay se enfurece al descubrir que Bouchard ha decidido que el tiburón sea expuesto al público. Al llegar a la instalación, el tiburón sufre una crisis y Kay su equipo son incapaces de evitar su muerte. Incluso FitzRoyce expresa lamentar lo ocurrido ante la joven, que le invite a que saque las fotos del cadáver. Tras actuar en su número, Kelly invita a Sean a la atracción de las barcas de choque, donde el joven sigue sin sentirse muy cómodo por su aversión al mar. Varios visitantes recorren los túneles subacuáticos para ver el inmenso lago de Mundo Marino desde su profundidad. Sin embargo, la cabeza de Overman aparece flotando ante una de las ventas. El resto del cuerpo es recuperado, y Kay analiza las mordeduras. Enseguida se da cuenta de que no ha sido atacado por el tiburón que capturaron, pues las mordeduras corresponden a un tiburón de once metros. 
Kay deduce que el tiburón de once metros es una hembra, que debió dar a luz al tiburón que capturaron dentro del parque.
Bouchard es informado en el restaurante submarino del parque por Kay y Michael, justo cuando el tiburón aparece ante la inmensa ventana submarina. El grupo concluye que el tiburón ha estado usando una de los tubos de filtración como escondite, de ahí los constantes problemas que ha estado provocando. Bouchard ordena que el parque sea cerrado, todos los trabajadores salgan del agua, y que los visitantes abandonen los túneles submarinos. El tiburón ataca un número de esquí acuático, pero todos los participantes logran salir del agua a tiempo. Tras esto el tiburón ataca la atracción de barcas de choque donde se encuentran Kelly y Sean. Kelly sufre una herida profunda pierna, pero Sean y FitzRoyce consiguen sacarla del agua para que sea enviada a un hospital. Sean se despide de Michael asegurándole que está bien, para acompañar a Kelly al hospital. 
Aunque los túneles subacuáticos comienzan a ser evacuados, el tiburón ataca uno de los túneles provocando una fuga de agua que está a punto de ahogar a un grupo de visitantes, hasta que las puertas de contención son cerradas, dejándolos atrapados aunque a salvo con oxígeno limitado.
Michael diseña un plan para poder evacuar a los visitantes atrapados en la atracción, y Kay le comunica en ese momento que irá con él a Venezuela. FitzRoyce y Jack deciden cooperar para hacer que el tiburón vuelva a entrar al del tubo de filtración, y así acabar con el animal atrapado. Para ello, FitzRoyce hará de cebo humano, y los demás podrán realizar las reparaciones necesarias para evacuar a los visitantes. Bouchard y Kay se establecen en la sala de control submarina para supervisarlo todo. FitzRoyce consigue atraer al tiburón dentro del tubo de filtración, y Michael se sumerge para realizar las reparaciones en el túnel subacuático. Sin embargo, la atadura de FitzRoyce se rompe enfrentándolo al tiburón que acaba con su vida. Kay decide bajar para ayudar a Michael sin saber lo que ha sucedido. Bouchard decide ahogar al tiburón atrapado cerrando las bombas, para que la turbina no termine por reventar por los golpes.
Jack se percata de que FitzRoyce ha fallecido al comprobar que no ha regresado. El plan de Bouchard sale mal y solo provoca que el enfurecido tiburón logre abrir la puerta y salir del tubo de filtración. El tiburón ataca a Michael y Kay, que vuelven a escapar cuando los delfines mantienen entretenido al animal con un breve ataque. Por fortuna, las reparaciones son completadas y los visitantes logran ser evacuados del túnel.
Michael y Kay llegan al centro de control, pero el tiburón aparece ante el gran ventanal y lo rompe de un golpe inundando la sala. Bouchard consigue salvar a una técnico, mientras otro es víctima mortal del tiburón. Michael y Kay se percatan de que el cadáver de FitzRoyce todavía es visible en la garganta del tiburón y sostiene una granada. Michael utiliza una vara doblada para tirar de la anilla, provocando que el tiburón explote. La pareja se dirige entonces a la superficie, cuando ya amanecido. Kay se preocupa por los delfines, pero para alegría de ambos, han logrado sobrevivir.

ESCENA
Sin duda me quedo con el ataque final del tiburón sobre la sala de control a lo 3D, y su destino final.

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