18 de Mayo de 2001
TÍTULO ORIGINAL
A Knight’s Tale
DIRECCIÓN
Brian Helgeland
PRODUCCIÓN
Todd Black, Brian Helgeland, Tim Van Rellimç
GUION
Brian Helgeland
REPARTO
Heath Ledger (William Thatcher), Rufus Sewell (Conde Adhemar), Shannyn Sossamon (Jocelyn), Paul Bettany (Geoffrey Chaucer), Laura Fraser (Kate), Mark Addy, (Roland), Alan Tudyk (Wat), James Purefoy (Sir Thomas Colville), Leagh Conwell (Joven William Thatcher), Christopher Cazenove (John Thatcher), Steven O’Donnell (Simon), Nick Brimble (Sir Ector), Roger Ashton-Griffiths (Obispo), David Schneider (Vendedor de reliquias)
CINEMATOGRAFÍA
Richard Greatrex
MÚSICA
Carter Burwell
DISTRIBUCIÓN
Columbia Pictures
DURACIÓN
132 minutos
WILLIAM THATCHER: “Algún día, seré un caballero.”
PRISIONERO: “¿El hijo de un techador caballero? Sí, y de paso intenta cambiar tu estrella.”
WILLIAM THATCHER: “¿Se puede hacer padre? ¿Puede un hombre cambiar su estrella?”
JOHN THATCHER: “Sí William, si tiene suficiente fe, puede hacer lo que sea.”
WILLIAM THATCHER: “Si pudiera pedirle algo a Dios, sería que parara la Luna, que parara la Luna e hiciera que esta noche y tu belleza fueran eternas.”
PRINCIPE EDWARD: “Vaya pareja hacemos, ¿eh? Los dos queriendo ocultar quienes somos, y los dos sin poder hacerlo. Tus hombres te quieren, si no supiera nada más de ti, eso bastaría, pero además acometes cuando deberías retirarte, y eso también es de caballeros. ¡Soltadle!”
CURIOSIDADES
La película esta inspirada en el cuento “The Knight’s Tale”, incluido en “Los Cuentos de Canterbury”. De hecho el personaje interpretado por Paul Bettany, Geoffrey Chaucer, se supone que es el autor de la mencionada obra.
El uso de anacronismos provocó que la crítica fuera bastante dura con la película, pero como suele ocurrir a menudo, esto no impidió que supusiera todo un éxito de taquilla, precisamente por ese mencionado uso. Brian Helgeland alegó que la acción se suponía transcurría alrededor de 1370, durante un periodo en que el escritor podría haber estado desaparecido para escribir la mencionada obra. También explica que su uso moderno de la música en el film es para demostrar que hay música, como por ejemplo la de la década de los setenta, que es atemporal y consigue sobrevivir a través del tiempo. De hecho, la banda sonora incluye temas de Queen, David Bowie o Thin Lizzy.
De ahí el uso intencionado de anacronismos que también incluyen vestuario moderno para lo que era la época, o la armadura de William Thatcher con el logo de Nike. Otros ejemplos incluyen los asistentes a las justas haciendo la ola, un baile medieval que se convierte en contemporáneo, peinados rocambolescos, o un uso del lenguaje actual. La idea general era que no se quería llevar a los espectadores modernos a la Edad Media, sino llevar la Edad Media a los espectadores modernos.
Las escenas de Justa resultaron todo un peligro, durante la producción de la película. En la primera justa que se ve en la película, se puede apreciar al doble de Heath Ledger sufriendo un accidente. Heath Ledger accidentalmente le arranco un diente de un mandoble al director Brian Helgeland mientras intentaban retocar un movimiento de estocada. La creación de las lanzas supuso también todo un reto ya que necesitaban que se rompiesen en pedazos contra los dobles sin causarles excesivo daño, para crear así un efecto visual espectacular. La película fue filmada en Praga, y mucho de los extras que participaron eran gente sin techo. La intención era que la representación de las clases más bajas de la estratificación medieval fuera lo más auténtica posible.
La película supuso todo un éxito en taquilla recaudando casi ciento veinte millones de dólares, habiendo costado cuarenta y uno. La critica se mostró no solo dividida por el uso de anacronismos, sino por la incapacidad de entender porque Thatcher elegiría a una mimada Jocelyn, en lugar de una mujer trabajadora y leal como Kate, el estilo de las justas, o la falta de un argumento lo suficientemente profundo.
Por cierto, no deben perderse los créditos del final, los escuderos participan en un interesante concurso que les hará reír.
NOTA PERSONAL
Quisiera, antes de nada, dedicar esta humilde entrada a la memoria de uno de mis actores favoritos Heath Ledger, que figura entre esas personas que ha logrado hacerme soñar, este donde este, deseo que encuentre la paz que no obtuvo en vida.
Dicho esto, debo hacer especial mención de “Destino de Caballero”. Esta es sin duda una de mis películas favoritas, ya que lo posee todo, aventura, emoción, comedia, romance, una maravillosa alegoría a la estratificación social, y sobre todo grandes dosis de originalidad. El personaje de William Thatcher simboliza al héroe que se resiste a rendirse ante las adversidades. Su sueño esta claro en su mente, y no se detiene en ningún momento, no importa cuales fueren las adversidades para lógralo. Sobre todo me encantó el toque moderno que se dio a una ambientación medieval, aportando vestuario con claras referencias a los años setenta (genial cuando se imprime la marca NIKE en la armadura de Sir Ulrich), mientras la música, casi toda rock, indica la diferencia generacional de los personajes. Esta combinación me pareció brillante, sobre todo porque logra funcionar aportando todo un espectáculo.
Hay ocasiones en las que sinceramente creo que resulta completamente innecesario buscarle tres pies al gato. Si bien la historia es bastante plana, aunque no estoy del todo de acuerdo con esto, hay que saber cuando uno acude al cine a ver una película de aventuras, sin más intención que la de pasar un buen rato.
Centrándome en el tema, creo que la película si trata de manera efectiva el tema de la estratificación social, si bien estoy de acuerdo que nos ofrece al mismo tiempo un final poco creíble. Es evidente que históricamente, la clase a la que pertenecen las personas influye en el futuro de estas, y mucho más si trasladamos la acción a la Edad Media. Precisamente esa es la intención del director, realizar una critica a la clase por encima de la habilidad. Como además su intención no es sumergirnos en la realidad de la Edad Media, sino utilizarla como escenario para plasmar ese mensaje, cualquier licencia que desee tomarse es adecuada. Lo que cuenta es el mensaje, que efectivamente es universal, y atemporal.
Luego esta el clásico tema de la identidad robada, y la liberación que supone asumir otra personalidad. Thatcher en todo momento necesita de esa identidad, y cuando se le fuerza a renunciar a ella, se viene abajo de manera inmediata, hasta que de nuevo, y esta vez de forma real se convierte en caballero. El Príncipe Edward tiene exactamente el mismo problema, ha de robar un identidad, algo menor en clase, para poder disfrutar de las Justas, pues constantemente le permiten ganar. Por ello, ambos personajes consiguen conectar, porque tienen esa debilidad, o necesidad, en común.
Por otro lado tenemos el tema de lealtad. El director resalta la facilidad de la lealtad y amistad en las clases inferiores, que en las superiores. Si bien no estoy convencido de que esta sea una realidad absoluta, evidentemente se refleja de una manera efectiva.
HISTORIA (esta sección contiene detalles de la trama y el argumento)
REPARTO
Heath Ledger (William Thatcher), Rufus Sewell (Conde Adhemar), Shannyn Sossamon (Jocelyn), Paul Bettany (Geoffrey Chaucer), Laura Fraser (Kate), Mark Addy, (Roland), Alan Tudyk (Wat), James Purefoy (Sir Thomas Colville), Leagh Conwell (Joven William Thatcher), Christopher Cazenove (John Thatcher), Steven O’Donnell (Simon), Nick Brimble (Sir Ector), Roger Ashton-Griffiths (Obispo), David Schneider (Vendedor de reliquias)
CINEMATOGRAFÍA
Richard Greatrex
MÚSICA
Carter Burwell
DISTRIBUCIÓN
Columbia Pictures
DURACIÓN
132 minutos
WILLIAM THATCHER: “Algún día, seré un caballero.”
PRISIONERO: “¿El hijo de un techador caballero? Sí, y de paso intenta cambiar tu estrella.”
WILLIAM THATCHER: “¿Se puede hacer padre? ¿Puede un hombre cambiar su estrella?”
JOHN THATCHER: “Sí William, si tiene suficiente fe, puede hacer lo que sea.”
WILLIAM THATCHER: “Si pudiera pedirle algo a Dios, sería que parara la Luna, que parara la Luna e hiciera que esta noche y tu belleza fueran eternas.”
PRINCIPE EDWARD: “Vaya pareja hacemos, ¿eh? Los dos queriendo ocultar quienes somos, y los dos sin poder hacerlo. Tus hombres te quieren, si no supiera nada más de ti, eso bastaría, pero además acometes cuando deberías retirarte, y eso también es de caballeros. ¡Soltadle!”
CURIOSIDADES
La película esta inspirada en el cuento “The Knight’s Tale”, incluido en “Los Cuentos de Canterbury”. De hecho el personaje interpretado por Paul Bettany, Geoffrey Chaucer, se supone que es el autor de la mencionada obra.
El uso de anacronismos provocó que la crítica fuera bastante dura con la película, pero como suele ocurrir a menudo, esto no impidió que supusiera todo un éxito de taquilla, precisamente por ese mencionado uso. Brian Helgeland alegó que la acción se suponía transcurría alrededor de 1370, durante un periodo en que el escritor podría haber estado desaparecido para escribir la mencionada obra. También explica que su uso moderno de la música en el film es para demostrar que hay música, como por ejemplo la de la década de los setenta, que es atemporal y consigue sobrevivir a través del tiempo. De hecho, la banda sonora incluye temas de Queen, David Bowie o Thin Lizzy.
De ahí el uso intencionado de anacronismos que también incluyen vestuario moderno para lo que era la época, o la armadura de William Thatcher con el logo de Nike. Otros ejemplos incluyen los asistentes a las justas haciendo la ola, un baile medieval que se convierte en contemporáneo, peinados rocambolescos, o un uso del lenguaje actual. La idea general era que no se quería llevar a los espectadores modernos a la Edad Media, sino llevar la Edad Media a los espectadores modernos.
Las escenas de Justa resultaron todo un peligro, durante la producción de la película. En la primera justa que se ve en la película, se puede apreciar al doble de Heath Ledger sufriendo un accidente. Heath Ledger accidentalmente le arranco un diente de un mandoble al director Brian Helgeland mientras intentaban retocar un movimiento de estocada. La creación de las lanzas supuso también todo un reto ya que necesitaban que se rompiesen en pedazos contra los dobles sin causarles excesivo daño, para crear así un efecto visual espectacular. La película fue filmada en Praga, y mucho de los extras que participaron eran gente sin techo. La intención era que la representación de las clases más bajas de la estratificación medieval fuera lo más auténtica posible.
La película supuso todo un éxito en taquilla recaudando casi ciento veinte millones de dólares, habiendo costado cuarenta y uno. La critica se mostró no solo dividida por el uso de anacronismos, sino por la incapacidad de entender porque Thatcher elegiría a una mimada Jocelyn, en lugar de una mujer trabajadora y leal como Kate, el estilo de las justas, o la falta de un argumento lo suficientemente profundo.
Por cierto, no deben perderse los créditos del final, los escuderos participan en un interesante concurso que les hará reír.
NOTA PERSONAL
Quisiera, antes de nada, dedicar esta humilde entrada a la memoria de uno de mis actores favoritos Heath Ledger, que figura entre esas personas que ha logrado hacerme soñar, este donde este, deseo que encuentre la paz que no obtuvo en vida.
Dicho esto, debo hacer especial mención de “Destino de Caballero”. Esta es sin duda una de mis películas favoritas, ya que lo posee todo, aventura, emoción, comedia, romance, una maravillosa alegoría a la estratificación social, y sobre todo grandes dosis de originalidad. El personaje de William Thatcher simboliza al héroe que se resiste a rendirse ante las adversidades. Su sueño esta claro en su mente, y no se detiene en ningún momento, no importa cuales fueren las adversidades para lógralo. Sobre todo me encantó el toque moderno que se dio a una ambientación medieval, aportando vestuario con claras referencias a los años setenta (genial cuando se imprime la marca NIKE en la armadura de Sir Ulrich), mientras la música, casi toda rock, indica la diferencia generacional de los personajes. Esta combinación me pareció brillante, sobre todo porque logra funcionar aportando todo un espectáculo.
Hay ocasiones en las que sinceramente creo que resulta completamente innecesario buscarle tres pies al gato. Si bien la historia es bastante plana, aunque no estoy del todo de acuerdo con esto, hay que saber cuando uno acude al cine a ver una película de aventuras, sin más intención que la de pasar un buen rato.
Centrándome en el tema, creo que la película si trata de manera efectiva el tema de la estratificación social, si bien estoy de acuerdo que nos ofrece al mismo tiempo un final poco creíble. Es evidente que históricamente, la clase a la que pertenecen las personas influye en el futuro de estas, y mucho más si trasladamos la acción a la Edad Media. Precisamente esa es la intención del director, realizar una critica a la clase por encima de la habilidad. Como además su intención no es sumergirnos en la realidad de la Edad Media, sino utilizarla como escenario para plasmar ese mensaje, cualquier licencia que desee tomarse es adecuada. Lo que cuenta es el mensaje, que efectivamente es universal, y atemporal.
Luego esta el clásico tema de la identidad robada, y la liberación que supone asumir otra personalidad. Thatcher en todo momento necesita de esa identidad, y cuando se le fuerza a renunciar a ella, se viene abajo de manera inmediata, hasta que de nuevo, y esta vez de forma real se convierte en caballero. El Príncipe Edward tiene exactamente el mismo problema, ha de robar un identidad, algo menor en clase, para poder disfrutar de las Justas, pues constantemente le permiten ganar. Por ello, ambos personajes consiguen conectar, porque tienen esa debilidad, o necesidad, en común.
Por otro lado tenemos el tema de lealtad. El director resalta la facilidad de la lealtad y amistad en las clases inferiores, que en las superiores. Si bien no estoy convencido de que esta sea una realidad absoluta, evidentemente se refleja de una manera efectiva.
HISTORIA (esta sección contiene detalles de la trama y el argumento)
A finales del siglo catorce nos encontramos con tres escuderos llamados William, Roland, Y Wat descubren de su señor Sir Ector ha fallecido de problemas intestinales en medio de un Torneo de Justa. Iba en cabeza tres lanzas a ninguna, y simplemente tenía que finalizar la siguiente ronda para ganar el torneo y ganar el suficiente dinero para poder mantenerles a todos. Mientras Wat y Roland se resignan a ser destituidos al no tener su protección, William Thatcher toma su armadura y yelmo, y se hace pasar por él para finalizar el torneo. A pesar de su evidente inexperiencia, y de llevarse más de un golpe de lanza en el rostro, consigue ganar el torneo, y su compensación monetaria, gracias a la ventaja de la que disfrutaba Hector inicialmente. Esto inspira a William a intentar mejorar con el adecuado entrenamiento, para poder vivir de las Justas, y poder mantener al resto de sus compañeros.
De camino a su primer torneo en Rouen, William y sus amigos se encuentran con el trovador Geoffrey Chaucer que ha perdido todas sus pertenencias, incluidas ropa y dinero. William logra convencer al escritor para que falsifique los documentos que han de probar su nobleza, debido a que esta prohibido que los plebeyos participen en las justas. De esta forma William Thatcher se inscribe bajo el falso nombre de Sir Ulrich von Liechtenstein de Gelderland. Se descubre entonces que Chaucer sufre de los clásicos problemas derivados de las apuestas. William le libra de todas sus deudas con el dinero que ha ganado con sus victorias en los torneos, logrando de esta forma ganarse su lealtad y servicios como heraldo durante los torneos. Con la ayuda de Chaucer, Wat y Roland, William comienza a ganar un tornero detrás de otro. Cuando la armadura que ha heredado de Sir Ector, recibe excesivos daños, William adquiere otra adición a su pintoresco grupo, Kate la herrera. Esta construye una nueva y revolucionaria armadura, resistente y ligera.
Durante los torneos, William conoce y se enamora de una joven noble llamada Jocelyn, que también ha despertado el interés del poderoso y malvado Conde Adhemar, que también participa en las Justas. Una rivalidad instantánea surge entre Adhemar y William por la atención de Jocelyn y las victorias del torneo, y Adhemar consigue derrotar a nuestro héroe en el primer torneo.
A pesar de esto, Jocelyn decide vestir a juego con William en el baile de celebración posterior, indicando su interés. Las conversaciones que mantiene con William sobre la pobreza y otras inquietudes, logran que la joven termine por enamorarse de él. Sin embargo, y para frustración de William, Adhemar se retira temporalmente del torneo para acudir a la Batalla de Poitiers. William ha de ganar todos los torneos hasta la final de Londres, para poder enfrentarse a su rival. En el siguiente torneo, ambos han de enfrentarse al Príncipe Edward, que participa bajo el seudónimo de Sir Thomas Colville, con la esperanza de poder competir contra sus oponentes sin que estos conozcan su identidad, y que así no se le den la victoria automáticamente sin necesidad de Justa. Adhemar consigue deducir su identidad y se retira de la Justa en el último momento. Sin embargo, William decide competir contra el Príncipe, logrando derrotarle en el torneo, y ganando su respeto por igual.
Tras esta buena señar, los amigos de William deciden apostar todo su dinero a que este logrará ganar en torneo de Francia que se celebrará en París. Al mismo tiempo, Jocelyn le hace saber a William que para probar su amor por ella a de perder su siguiente tormento. Al comprobar como encaja una estocada detrás de otro, Jocelyn cambia de opinión y le hace saber que ha de vencer para probar su amor por ella. William vence, para reunirse con Jocelyn que atiende a sus heridas y pasa la noche con él.
El grupo se traslada a Londres para el Torneo Mundial de Justa, y durante el viaje, William recuerda su infancia. Su padre, buscando el mejor interés para su hijo, cedió su custodia como aprendiz de escudero a Sir Ector, con la esperanza de que algún día sus su sueño de convertirse en caballero, y cambiar su estrella, le permitieran vivir una vida mejor. Después de recordar la mencionada separación, William se adentra en Londres por primera vez desde su infancia. Con la idea de que su padre debe de llevar tiempo muerto, William visita su antiguo barrio y pregunta a una chica local acerca del destino que corrió. Esta le informa de que su padre aún sigue con vida, aunque ha quedado ciego. William visita a su padre, primeramente ocultando su verdadera identidad, y aludiendo a que trae un mensaje de su padre. Dicho mensaje es que finalmente ha logrado cambiar su estrella, este mensaje hace que su padre se de cuenta de que tiene a su hijo en frente suya. Ambos se abrazan y pasan la noche hablando de sus experiencias.
Aunque todo parece ir bien, Adhemar ha regresado de sus luchas en la Batalla de Poitiers, y consigue descubrir que William es de origen plebeyo. Tras ser delatado a las autoridades, William recibe el aviso de sus amigos de que todo se ha descubierto, Jocelyn también le recomienda escapar. Sin embargo, William se niega a hacerlo, y al intentar participar en la siguiente Justa, es arrestado. Adhemar le visita en prisión para torturarle con la idea de que acabara por casarse por Jocelyn y ganará el torneo. Tras esto, William es colocado en un cepo en una plaza de Londres, la muchedumbre le abuchea mientras sus amigos intentan interceder por él. De entre la muchedumbre surge el Príncipe Edward. Tras ordenar silencio, se dirige a William haciéndole saber que ha llegado su turno de devolverle el favor. Tras liberarle del cepo, le nombra caballero ante una atónita muchedumbre, tras alegar que ha descubierto que el muchacho desciende después de todo de la nobleza. De esta manera, William es capaz de volver a incorporarse al torneo.
Su padre asiste al torneo, acompañado de Jocelyn, así como el mismísimo Príncipe Edward. Sir Adhemar decide hacer trampa con un golpe ilegal, con una lanza con extremo afilado, algo que esta prohibido. La lanza se clava en el hombro de William, dejándolo incapaz de sostener la suya. William ordena que se le aten al brazo, retirando toda su armadura, para poder respirar con tranquilidad. En el último combate, William se lanza contra Adhemar gritando su propio nombre, como símbolo de que ha aceptado su verdadera identidad. William consigue golpear a Adhemar y derribarle de su caballo. Mientras Chaucer considera escribir la historia que la ha tocado vivir, Jocelyn se dirige hacia William besándole para celebrar su victoria final. William Thatcher ha logrado cambiar su estrella.
ESCENA
Con la ayuda de Chaucer y Kate, William Thatcher se embarca en la dificultosa misión de escribir una carta de amor a Jocelyn.
De camino a su primer torneo en Rouen, William y sus amigos se encuentran con el trovador Geoffrey Chaucer que ha perdido todas sus pertenencias, incluidas ropa y dinero. William logra convencer al escritor para que falsifique los documentos que han de probar su nobleza, debido a que esta prohibido que los plebeyos participen en las justas. De esta forma William Thatcher se inscribe bajo el falso nombre de Sir Ulrich von Liechtenstein de Gelderland. Se descubre entonces que Chaucer sufre de los clásicos problemas derivados de las apuestas. William le libra de todas sus deudas con el dinero que ha ganado con sus victorias en los torneos, logrando de esta forma ganarse su lealtad y servicios como heraldo durante los torneos. Con la ayuda de Chaucer, Wat y Roland, William comienza a ganar un tornero detrás de otro. Cuando la armadura que ha heredado de Sir Ector, recibe excesivos daños, William adquiere otra adición a su pintoresco grupo, Kate la herrera. Esta construye una nueva y revolucionaria armadura, resistente y ligera.
Durante los torneos, William conoce y se enamora de una joven noble llamada Jocelyn, que también ha despertado el interés del poderoso y malvado Conde Adhemar, que también participa en las Justas. Una rivalidad instantánea surge entre Adhemar y William por la atención de Jocelyn y las victorias del torneo, y Adhemar consigue derrotar a nuestro héroe en el primer torneo.
A pesar de esto, Jocelyn decide vestir a juego con William en el baile de celebración posterior, indicando su interés. Las conversaciones que mantiene con William sobre la pobreza y otras inquietudes, logran que la joven termine por enamorarse de él. Sin embargo, y para frustración de William, Adhemar se retira temporalmente del torneo para acudir a la Batalla de Poitiers. William ha de ganar todos los torneos hasta la final de Londres, para poder enfrentarse a su rival. En el siguiente torneo, ambos han de enfrentarse al Príncipe Edward, que participa bajo el seudónimo de Sir Thomas Colville, con la esperanza de poder competir contra sus oponentes sin que estos conozcan su identidad, y que así no se le den la victoria automáticamente sin necesidad de Justa. Adhemar consigue deducir su identidad y se retira de la Justa en el último momento. Sin embargo, William decide competir contra el Príncipe, logrando derrotarle en el torneo, y ganando su respeto por igual.
Tras esta buena señar, los amigos de William deciden apostar todo su dinero a que este logrará ganar en torneo de Francia que se celebrará en París. Al mismo tiempo, Jocelyn le hace saber a William que para probar su amor por ella a de perder su siguiente tormento. Al comprobar como encaja una estocada detrás de otro, Jocelyn cambia de opinión y le hace saber que ha de vencer para probar su amor por ella. William vence, para reunirse con Jocelyn que atiende a sus heridas y pasa la noche con él.
El grupo se traslada a Londres para el Torneo Mundial de Justa, y durante el viaje, William recuerda su infancia. Su padre, buscando el mejor interés para su hijo, cedió su custodia como aprendiz de escudero a Sir Ector, con la esperanza de que algún día sus su sueño de convertirse en caballero, y cambiar su estrella, le permitieran vivir una vida mejor. Después de recordar la mencionada separación, William se adentra en Londres por primera vez desde su infancia. Con la idea de que su padre debe de llevar tiempo muerto, William visita su antiguo barrio y pregunta a una chica local acerca del destino que corrió. Esta le informa de que su padre aún sigue con vida, aunque ha quedado ciego. William visita a su padre, primeramente ocultando su verdadera identidad, y aludiendo a que trae un mensaje de su padre. Dicho mensaje es que finalmente ha logrado cambiar su estrella, este mensaje hace que su padre se de cuenta de que tiene a su hijo en frente suya. Ambos se abrazan y pasan la noche hablando de sus experiencias.
Aunque todo parece ir bien, Adhemar ha regresado de sus luchas en la Batalla de Poitiers, y consigue descubrir que William es de origen plebeyo. Tras ser delatado a las autoridades, William recibe el aviso de sus amigos de que todo se ha descubierto, Jocelyn también le recomienda escapar. Sin embargo, William se niega a hacerlo, y al intentar participar en la siguiente Justa, es arrestado. Adhemar le visita en prisión para torturarle con la idea de que acabara por casarse por Jocelyn y ganará el torneo. Tras esto, William es colocado en un cepo en una plaza de Londres, la muchedumbre le abuchea mientras sus amigos intentan interceder por él. De entre la muchedumbre surge el Príncipe Edward. Tras ordenar silencio, se dirige a William haciéndole saber que ha llegado su turno de devolverle el favor. Tras liberarle del cepo, le nombra caballero ante una atónita muchedumbre, tras alegar que ha descubierto que el muchacho desciende después de todo de la nobleza. De esta manera, William es capaz de volver a incorporarse al torneo.
Su padre asiste al torneo, acompañado de Jocelyn, así como el mismísimo Príncipe Edward. Sir Adhemar decide hacer trampa con un golpe ilegal, con una lanza con extremo afilado, algo que esta prohibido. La lanza se clava en el hombro de William, dejándolo incapaz de sostener la suya. William ordena que se le aten al brazo, retirando toda su armadura, para poder respirar con tranquilidad. En el último combate, William se lanza contra Adhemar gritando su propio nombre, como símbolo de que ha aceptado su verdadera identidad. William consigue golpear a Adhemar y derribarle de su caballo. Mientras Chaucer considera escribir la historia que la ha tocado vivir, Jocelyn se dirige hacia William besándole para celebrar su victoria final. William Thatcher ha logrado cambiar su estrella.
ESCENA
Con la ayuda de Chaucer y Kate, William Thatcher se embarca en la dificultosa misión de escribir una carta de amor a Jocelyn.
Me encanta esta pelicula,su inspiracion y sus trajes tiene una linea diferente sobre lo acostubrado a ver sobre esa epoca...Un saludo
ResponderEliminarLa película ofrece no solo la historia de un caballero de corazón frente a un caballero oficial pero que en el fondo es un patán, sino también una historia de amor tierna y sobre todo una historia de lealtad por parte de sus amigos, que en un momento están dispuestos a dar la vida por el protagonista, todo dentro de un marco de escenas agradables a la vista y al oído (incluyendo el concurso final de los escuderos). Creo que la película es genial.
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