FECHA DE ESTRENO
4 de Marzo de 1922
TÍTULO ORIGINAL
Nosferatu, eine Symphonie des Grauens
DIRECCIÓN
Friedrich Wilhelm Murnau
PRODUCCIÓN
Enrico Dieckmann, Albin Grau
GUION
Henrik Galeen
Henrik Galeen
Basado en “Drácula” de Bram
Stoker
REPARTO
Max Schreck (Conde Orlok), Gustav
von Wangenheim (Thomas Hutter), Greta Schröder (Ellen Hutter), Alexander
Granach (Knock), Ruth Landshoff (Annie), Wolfgang Heinz (Primer Oficial del
Empusa), Georg H. Schnell (Harding), John Gottowt (Profesor Bulwer), Gustav
Botz (Profesor Sievers), Max Nemetz (Capitán del Empusa), Heinrich Witte
(Guardia en el asilo), Guido Herzfeld (Posadero), Karl Etlinger (Estudiante con
Bulwer), Hardy von Francois (Doctor del hospital), Fanny Schreck (Enfermera del
hospital)
CINEMATOGRAFÍA
Fritz Arno Wagner, Günther Krampf
BANDA SONORA
Hans Erdmann
DISTRIBUCIÓN
Film Arts Guild
Film Arts Guild
DURACIÓN
94 minutos
94 minutos
“Nosferatu” fue la única producción de “Prana Film”,
compañía fundada en el año 1921 por Enrico Dieckmann y Albin Grau. Este último
tuvo la idea de rodar una película sobre vampiros, inspirándose en una
experiencia personal. En el invierno de 1916, un granjero serbio le había dicho
que su padre era un vampiro, un no muerto. Dieckmann y Grau le entregaron a
Henrik Galeen la tarea de escribir un guion inspirado que estuviera inspirado
en la novela de Bram Stoker, “Drácula”, del año 1897. Sin embargo, “Prana Film”
no se había hecho con los derechos de la película. Galeen era un especialista
experimentado en el romanticismo oscuro; y ya había trabajado en la película de
1913, “El Estudiante de Praga”, así como en el guion de la película de 1920 “El
Golem”.
Galeen estableció la historia en una ciudad ficticia
llamada Wisborg, supuestamente situada en un puerto del norte, y cambió los
nombres de los personajes. Añadió la idea de que el vampiro provocara que la
población pensara que las muertes provocadas por él, fueran causa de la plaga.
Dejó de lado el personaje del cazador de vampiros Van Helsing.
El guion de
Galeen poseía un estilo poéticamente rítmico, sin resultar tan desmembrado como
otros libros influenciados por el Expresionismo literario.
El rodaje comenzó en julio de 1921, y las tomas
exteriores tuvieron lugar en Wismar. Se utilizó una toma de la torre sobre el
mercado de Wismar para establecer las escenas de Wisborg. En Lübeck, el
abandonado Salzpeicher (Almacén de Sal) sirvió como la nueva casa de Nosferatu
en Wisborg, una en el cementerio para la casa de los de Hutter. Los exteriores
de la película que sirvieron para las escenas en Transilvania, tuvieron lugar
en la región del norte de Eslovaquia. El equipo rodó las escenas de interiores
en el estudio JOFA de Berlín. Por motivos de escaso presupuesto, el cámara
Fritz Arno Wagner solo disponía de una cámara, y por lo tanto solo hubo un
negativo original. El director siguió el guion de Gallen cuidadosamente,
siguiendo instrucciones escritas sobre el posicionamiento de la cámara, la luz
y otros temas relacionados con el rodaje. A pesar de esto, Murnau reescribió
doce páginas del guion por completo debido a que faltaba el texto de Galeen en
la copia del guion que el director había recibido.
Dichos cambios eran en
relación con la última escena de la película, en la que Ellen se sacrificaba y
el vampiro fallecía bajo los primeros rayos del sol. Murnau se preparó
cuidadosamente; y existían borradores que correspondían a cada una de las
escenas rodadas. También utilizó un metrónomo para controlar el ritmo de las
interpretaciones.
La banda sonora original fue compuesta por Hans Erdmann
para ser interpretada por una orquesta durante la proyección de la película.
Sin embargo, la mayor parte de la música se ha perdido, y lo que queda es solo
una reconstitución de lo que fue interpretado en el año 1922. Este es el motivo
por el que muchos compositores y músicos han improvisado su propia música para
acompañar a la película. Por ejemplo, Hames Bernard, compositor de muchas
bandas sonoras de las películas de terror de Hammer en las décadas de 1950 y
1960, ha reescrito una banda sonora para ser reutilizada. En 1989, el venerable
Art Zoyd, incondicional del rock
progresivo, lanzó “Nosferatu” en Mantra Records.
Thierry Zaboitzeff y Gérard
Hourbette compusieron las Pieces, para corresponder con una versión truncada de
la película que se estaba distribuyendo con fuerza. En 2010, los “Mallarme
Chamber Players of Durham”, en Carolina del Norte, contrataron al compositor
Eric Schwartz para componer una partitura de música de cámara experimental para
ser interpretada en directo junto a emisiones de la película.
“Nosferatu” logró reforzar la imagen del director Murnau
a los ojos del público, especialmente cuando su película “La Tierra en Llamas”
fue estrenada unos días más tarde. La prensa realizó numerosos artículos sobre
“Nosferatu” en su estreno. Añadido a los elogios, también hubo críticas
ocasionales. Estas se concentraron en la perfección técnica y la claridad de
las imágenes, las cuales se argumentaban que no iban a la par con un tema de
terror. Se llegó a declarar que el vampiro aparecía demasiado corpóreo y con
una luz brillante, por lo que no parecía todo lo aterrador que se podía
esperar.
A pesar de esas críticas ocasionales, la película terminó por
convertirse en una obra maestra a los ojos de mucho, así como en todo un
clásico del cine de terror. Se realizó un remake de la película, el cual se
estrenó en el año 1979 titulada “Nosferatu, Vampiro de la Noche”. En esta
ocasión, no se trató de una película muda.
La primera vez que pude ver esta película era solo un crío, y lo
hice gracias a una copia que había conseguido un tío mío. De hecho, fue la
primera película muda que vi, y me causó un impacto tremendo. A pesar de su
carencia de diálogos, me tuvo enganchado a la pantalla y recuerdo pasar un
verdadero pánico. Fue tanto que apenas pude dormir durante la noche, y el
recuerdo se me quedó grabado. Pasaron muchos años hasta que pude ver la
película una vez más, y ya no me produjo miedo alguno. Supongo, que esto se
debe a que es un film enmarcado en una época y estilo muy contrato. Sin
embargo, me sigue pareciendo una película excepcional, y es innegable que sigue
estando cargada de una atmosfera inquietante.
La interpretación de Max
Schreck es sencillamente espeluznante. De hecho el aspecto del peculiar vampiro
sería utilizado repetidamente en el futuro, como en la serie de televisión “El
Misterio de Salem Slot”. Por otro lado, la música es excepcional y consigue
combinar un estilo poético con algo tan dispar como una historia de terror. Me
fascinan las interpretaciones exageradas del resto de los personajes, así como
todos los entornos elegidos para la película.
Acabaré señalando que no soy un
gran fan de las películas mudas, pero reconozco su mérito y cuanto menos
interesante estilo. En este caso, esta película nunca se me ha hecho lento, y
siempre me ha mantenido atento a la pantalla. No cabe duda de que se trata de
todo un clásico.
HISTORIA (esta sección contiene detalles de la trama y el
argumento)
ACTO I
En la ciudad de Wisborg, Alemania, Thomas Hutter vive feliz en
compañía de su esposa Ellen. Una mañana en el trabajo, su jefe Knock le
comunica su decisión de enviarle a Transilvania con la intención de que se
reúna con un nuevo cliente llamado el Conde Orlok. Este desea trasladarse a
Wisborg, y Knock le encarga que le venda una lúgubre casa abandonada. El trabajo
es una gran oportunidad para Thomas, quien se reúne con su esposa Ellen para
comunicarle el encargo. Su amigo Harding, en compañía de su hermana Annie, le
tranquiliza asegurándole que cuidara de Ellen durante su ausencia. De esta
forma, Thomas parte hacia Transilvania.
Cerca de su destino en las montañas de los Cárpatos, Hutter se
detiene en una posada para cenar. El posadero se muestra muy amable, pero
cuando Thomas menciona que ha viajado
para reunirse con el Conde Orlok, todos se muestran atemorizados, y le
aconsejan que no viaje allí durante la noche, pues un hombre lobo merodea por
las proximidades. Thomas no se toma en serio esas supersticiones y se ríe ante
esas historias.
Tampoco se toma en serio la supuesta existencia de un ser
sobrenatural llamado el Nosferatu, que se alimenta de la sangre humana. A pesar
de esto, decide quedarse a dormir en la posada.
A la mañana siguiente, Thomas toma un carruaje en dirección al
castillo de Conde Orlok. Sin embargo, los cocheros se niegan a llevarle más allá
de un puente, ya que está a punto de caer la noche, y según ellos un diablo
reside por esos lugares. Thomas sigue sin tomarse estas historias en serio, y
parte caminando hasta que es recibido por un carruaje negro. Su cochero le
indica mediante gestos que suba al carruaje. De esta forma, Thomas es llevado
hasta el castillo donde es recibido por el Conde Orlok, quien le da la
bienvenida.
ACTO II
El Conde Orlok invita a Thomas a cenar mientras lee con
detenimiento el contrato de compra de su nueva casa en Wisborg. Durante la
cena, Thomas comienza a inquietarse por el lúgubre aspecto del Conde, y se
corta un dedo con el cuchillo mientras corta una hogaza de pan.
El Conde
percibe la presencia de la sangre e intenta chupar la sangre fuera, pero Thomas
retira su mano sintiendo repulsa. Sin embargo, Orlok le hipnotiza para que se
quede un rato más en su compañía.
A la mañana siguiente, Thomas se despierta y percata de dos
perforaciones en su cuello, las cuales atribuye a las mordeduras de mosquitos o
arañas. Thomas le escribe una carta a su esposa, y hace que un local se
encargue de llevarla a caballo. Esa misma noche, Orlok firma los documentos de
compra de su nueva casa, justo en frente de la casa de Thomas. Durante la
firma, Thomas deja caer una fotografía de Ellen, y Nosferatu queda prendado de
ella elogiando la belleza de su cuello. Cada vez más inquieto, Thomas comienza
a sospechar que Orlok es Nosferatu. Llegada la noche, intenta refugiarse en su
habitación, pero no hay manera de bloquear la puerta, y la ventana da a un
acantilado. La puerta de su habitación se abre y Orlok entra en si interior
revelando su verdadera naturaleza. Thomas cae inconsciente, mientras en Wisborg
Ellen tiene una horrible pesadilla que le hace temer por la suerte de su
esposo.
Al día siguiente, Thomas comienza a explorar el castillo hasta
llegar a una cripta. Allí descubre a Orlok descansando dentro de un ataúd.
Aterrorizado, Thomas se refugia en su habitación. Horas más tarde observa como
Orlok está cargando varios ataúdes en un carruaje, y como se introduce en el
último antes de que el carruaje parta. Aterrorizado al pesar que Ellen corre
peligro, Thomas intenta salir del castillo por la ventana, pero acaba
despeñándose y queda inconsciente.
ACTO III
Thomas despierta en un hospital, donde una enfermera le explica al
médico que fue encontrado con alta fiebre. Los ataúdes de Orlok son cargados a
bordo del barco conocido como el Empusa. Los ataúdes son inspeccionados por la
tripulación, revelando que contienen tierra, mientras uno de ellos está lleno
de ratas. Mientras tanto, en Wisborg, el Profesor Bulwer explica la naturaleza
de las plantas carnívoras a sus alumnos, comparándolas con los vampiros.
También se revela que Knock ha estado siempre bajo la influencia de Nosferatu,
y ante su proximidad pierde la razón y es encerrado en un asilo donde consume
insectos asegurando que la sangre es vida. En su locura, Knock llega a atacar
al director del asilo.
Por su parte Ellen ha caído en la melancolía, añorando la compañía
de su esposo. Harding y Anna reciben la carta de Thomas y corren a entregársela
a Ellen. Al mismo tiempo, Thomas se recupera y parte hacia Wisborg preocupado
por el peligro que corre su esposa. El Empusa prosigue su viaje hacia Wisborg,
y su tripulación ignora el peligro que llevan consigo. Sus marineros comienzan,
uno tras otro, a enfermar con altas fiebres. La situación se vuelve
insostenible cuando solo quedan con vida el Primer Oficial y el Capitán.
Sospechando lo que ocurre, el Primer Oficial se dispone a destruir los ataúdes.
Sin embargo, Orlok se despierta y el Primer Oficial, aterrorizado salta al mar.
El Capitán, inconsciente del peligro, se ata al timón, convirtiéndose en la última
víctima de Orlok.
ACTO IV
En Wisborg, Ellen ha comenzado a caminar dormida, sintiéndose
hipnotizada por una fuerza extraña. El Empusa llega a Wisborg, y Orlok parte a
su nueva residencia sin ser observado y portando su propio ataúd.
Al sentir la llegada de su amo, Knock ataca a un guardia del asilo y consigue escapar. Thomas también logra regresar a casa y reunirse con Ellen.
Al sentir la llegada de su amo, Knock ataca a un guardia del asilo y consigue escapar. Thomas también logra regresar a casa y reunirse con Ellen.
A la mañana siguiente, las autoridades portuarias examinan el
Empusa y encuentran a su Capitán sin vida. Al inspeccionar el cuaderno de
bitácora, asumen que sus tripulantes fueron víctimas de la peste. El pánico por
la peste se desata en Wisborg, y se insta a los ciudadanos a que permanezcan en
sus casas.
ACTO V
Varias muertes comienzan a tener lugar por toda la ciudad, pero
son achacadas a la plaga. Mientras tanto, Ellen lee el libro de Thomas sobre la
existencia de Nosferatu, y descubre que la criatura solo puede ser detenida si
una mujer virtuosa consigue que se olvide del canto del primer canto del gallo.
Las muertes siguen sucediendo, y los habitantes de Wisborg, deseosos de
encontrar un responsable, culpan al demente Knock al que comienzan a perseguir hasta
capturarle.
Ellen decide abrir su ventana para invitar a Nosferatu con la
esperanza de acabar con él, pero se desmalla. Thomas la acuesta y corre para
avisar al Doctor Bulwer. Una vez sola, Ellen se recupera a tiempo para recibir
a Orlok. Nosferatu comienza a beber la sangre de la joven y pierde la noción
del tiempo hasta que el gallo canta anunciando el amanecer. En el asilo, Knock
se desespera ante el peligro que corre su amo. Orlok intenta abandonar la
habitación, pero se desintegra en humo ante la luz del sol, perdiendo la vida.
Thomas llega con el Doctor Bulwer a tiempo de ver como Ellen pierde la vida,
habiéndose sacrificado para acabar con el vampiro. Las muertes dejan de tener
lugar en Wisborg, mientras que en Transilvania, el castillo de Orlok queda en
ruinas.
ESCENA
Genial y escalofriante escena en la que el Conde Orlok visita a
Hutter por la noche, y como el joven lo descubre en su ataúd a la mañana
siguiente.
Sin duda es una gran película. Por primera vez la vi hace más de tres décadas (en las funciones de TV de media noche que es cuando solían pasar estas obras) y me llamó la atención. Recientemente la encontré en una sección de películas históricas y decidí verla con mis hijas pequeñas como parte de una formación cultural. Pensé que quizá se iban a dormir, aburrir o quizá tener un poco de miedo, todo lo contrario, estuvieron bien metidas en la trama toda la película y en ocasiones comentaban aspectos que yo no había captado. No cabe duda que una buena película trasciende el tiempo.
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