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miércoles, 26 de octubre de 2016

BITELCHÚS

FECHA DE ESTRENO
30 de Marzo de 1988
TÍTULO ORIGINAL
Beetlejuice
DIRECCIÓN
Tim Burton
PRODUCCIÓN
Larry Wilson, Michael Bender, Richard Hashimoto
GUION
Michael McDowell, Warren Skaaren
REPARTO
Michael Keaton (Bitelchús), Alec Baldwin (Adam Maitland), Geena Davis (Barbara Maitland), Winona Ryder (Lydia Deetz), Catherine O’Hara (Delia Deetz), Jeffrey Jones (Charles Deetz), Annie McEnroe (Jane Butterfield), Glenn Shadix (Otho), Sylvia Sidney (Juno), Robert Goulet (Maxie Dean), Maree Cheatham (Sarah Dean), Dick Cavett (Bernard), Susan Kellermann (Grace), Adelle Lutz (Beryl), Simmy Bow (Conserje), Carmen Filpi (Mensajera), Patrice Martinez (Recepcionista), Tony Cox (Predicador), Jack Angel (Voz del predicador)
CINEMATOGRAFÍA
Thomas E. Ackerman
BANDA SONORA
Danny Elfman
DISTRIBUCIÓN
Warner Bros.
DURACIÓN
92 minutos

ADAM MAITLAND: “¿Cuál es su curriculum vitae?”
BITELCHÚS: “Pues estudie música, me gradué en la escuela comercial de Harvard, he viajado bastante, sobreviví a la peste negra y lo pasé en grande mientras duró. He visto ‘El Exorcista’ ciento sesenta y siete veces, y cada vez que la veo la encuentro más graciosa. Aparte de que estáis hablando con un muerto… ¿Qué os parece? ¿Es muy buen curriculum?”

CURIOSIDADES
Tras el éxito financiero de la película “La Gran Aventura de Pee-wee” (1985), Tim Burton comenzó a ser considerado un director rentable, y comenzó a trabajar con Sam Hamm en un guion para “Batman”. Aunque la compañía Warner Bros estaba dispuesta a financiar el desarrollo un guion, una película sobre Batman no era tan atractiva. Mientras tanto, Tim Burton había comenzado a leer los guiones que le habían sido enviados, y se mostró decepcionado por su carencia de imaginación y originalidad. 
Fue David Geffen quien le entregó el guion de “Bitelchús”, escrito por Michael McDowell, quien había escrito el guion de un episodio de “Alfred Hitchcock Presenta”, dirigida por el propio Burton. Se incluyó a Wilson en el proyecto para que continuara reescribiendo el guion con McDowell, aunque Burton terminó por reemplazarlos con Warren Skaaren debido a diferencias creativas.
El guion original de McDowell contenía escasa comedía siendo mucho más oscuro. El accidente de coche de los Maitland era más trágico, describiendo gráficamente como el brazo de Barbara resultaba aplastado y el como la pareja gritaba pidiendo ayuda antes de ahogarse lentamente en el río. Existe una referencia a esto en la película, ya que Barbara menciona que su brazo esta frío al regresar a casa como fantasma. En lugar de poseer a los Deetz y obligarles a bailar durante la cena, los Maitland lograban dotar a una alfombra de vida para que atacara a la familia atándoles a sus sillas. El personaje de Bitelchús diseñado por McDowell era un demonio alado que tomaba la forma de un hombre de Oriente Medio y baja estatura.
También tenía la intención clara de matar a los Deetz en lugar de asustarlos para que se marchen, así como la intención de violar a Lydia en lugar de casarse con ella. En esta versión del guion, Bitelchús solo necesitaba ser exhumado de su tumba para ser convocado, tras lo cual ya era libre para provocar el caos. No podía ser convocado o controlado al pronunciar su nombre tres veces, y podía vagar por el mundo en libertado, atormentando a varios personajes mediante diferentes manifestaciones. El guion de McDowell también incluía a una niña pequeña de nueve años, Cathy, que era la segunda hija de los Deetz y la única capaz de ver los fantasmas. Cathy también era el objeto de la ira homicida de Bitelchús al final de la historia, en la cual lograba mutilarla tomando la forma de una ardilla rabiosa antes de revelar su verdadera forma. La película iba a concluir con los Maitland, los Deetz y Otho realizando un exorcismo que destruía a Bitelchús. Tras esto, los Maitland se transformaban en versiones en miniatura de sí mismos, residiendo en la maqueta de Adam.
La primera elección de Burton para interpretar a Bitelchús fue Sammy Davis Jr, pero fue el propio Geffen quien se sugirió que contara con Michael Keaton. Burton no estaba familiarizado con el trabajo de Keaton, pero no tardó en ser convencido. Burton eligió a Winona Ryder tras observar su trabajo en su primera película “Lucas” (1986). Catherine O’Hara se presentó voluntaria para interpretar a la snob Delia Deetz; mientras que conseguir actores conocidos para el resto de los papeles supuso toda una dificultad para Burton, ya que todos pensaban que la historia era demasiado extraña.
El presupuesto original para la película fue de quince millones de dólares, de los cuales solamente uno fue otorgado al trabajo de efectos visuales. Considerando la escala e importancia de dichos efectos, que incluían técnicas de stop motion, maquillaje con prótesis, animación de sustitución, manejo de marionetas, Burton tenía en mente que la película reflejara aquellas de Serie B que había visto siendo niño. Deseaba que el aspecto fuera falso y tuviera apariencia barata a propósito. 
Tras ver su trabajo en las películas “En Compañía de Lobos” (1984) y “La Chaqueta Metálica” (1987), Burton quiso contratar a Anton Furst como Diseñador de Producción. Sin embargo, Furst se había comprometido con “El Hotel de los Fantasmas” (1988), una elección que terminaría por lamentar más adelante. Burton terminó por contratar a Bo Welch, quien volvería a colaborar con él en “Eduardo Manostijeras” (1990) y “Batman Returns” (1992). Las proyecciones de prueba fueron tuvieron una respuesta muy positiva, por lo que Burton decidió añadir el final en el que Bitelchús enfurecía a un chamán. La Warner se mostró en contra de que la película se titulara “Bitelchús”, prefiriendo “La Casa de los Fantasmas”. Sin embargo, Burton consiguió imponerse. El rodaje en exteriores tuvo lugar en East Corinth, Vermont.
La película fue todo un éxito de taquilla y dio lugar a una serie de dibujos animados que llegó a contar con noventa y cuatro capítulos distribuidos en cuatro temporadas. La película se hizo con el Oscar al Mejor Maquillaje. 
A fecha actual, Tim Burton la sigue considerando su película favorita entre las que ha dirigido.

NOTA PERSONAL
Sin duda es una de las mejores películas de Tim Burton, procedente de una época en la que el director se fijaba más en las historias verdaderamente imaginativas y creativas. Lamentablemente, Burton ha perdido esa capacidad hace ya bastante tiempo. Michael Keaton realiza una formidable labor interpretando al pícaro fantasma Bitelchús, que aunque despierta rechazo del resto de los personajes, empatiza mucho con los espectadores. Es increíblemente divertido, sobre todo teniendo en cuenta que siendo el protagonista cuenta con poco tiempo de metraje. También llama la atención una jovencísima Winona Ryder interpretando a la gótica, marginada y depresiva joven, que recupera las ganas de vivir gracias a los muertos. La película está plagada de escenas brillantes y desternillantes, entre las que se encuentran la visita a la sala de espera del más allá o la familia poseída bailando calipso; pero también contiene un guion bastante ingenioso y personajes brillantes.
La verdad es que vi la película alquilándola en video, siendo la primera que pude ver de Tim Burton. A raíz de ella he seguido su trabajo aunque varias de sus últimas películas no me hayan impresionado demasiado. A fecha de hoy, “Big Fish” sigue siendo la película de Tim Burton que más ha logrado impresionarme, aunque varias la siguen de cerca. “Bitelchús” es una de ellas, ya que demuestra que no es necesario crear una historia excesivamente elaborada para que sea original y creativa.

HISTORIA (esta sección contiene detalles de la trama y el argumento)
Adam y Barbara Maitland están pasando sus vacaciones en su casa campestre en Connecticut, aprovechando el tiempo libre para decorarla. La pareja lleva tiempo intentando tener hijos sin éxito, por lo que Jane Butterfield lleva tiempo intentando convencerles para que vendan su casa a una familia con hijos. Adam y Barbara regresan de hacer unas compras en el pueblo al pie de la colina de su casa, cuando tienen un accidente de coche al esquivar a un perro en un puente. 
Ambos regresan a casa empapados y empiezan a manifestar extrañas habilidades como inmunidad al fuego. Adam intenta salir de casa para volver al puente y acaba en una dimensión desértica y extraña con una criatura gigantesca. Barbara lo rescata de vuelta a la casa y le muestra que ya no tienen reflejo en el espejo, y han recibido un manual para difuntos. Debido a esto, la pareja comienza a sospechar que no sobrevivió al accidente. Jane visita la casa de luto pero no puede verles, por lo que aceptan el hecho de que son fantasmas atrapados en su propia casa.
Sin embargo, la casa donde están atrapados no tarda en ser vendida a Charles y su segunda esposa Delia Deetz y la extraña hija del primer matrimonio de Charles Lydia. La familia es completamente snob, arrogante y superficial, con excepción de Lydia. Mientras Delia examina la casa con el decorador Otho, los Maitland intentan asustarles sin éxito, a pesar de poder transformarse en monstruos o deformidades, ya que la familia no puede verles. 
La casa es redecorada y convertida en un lugar snob repleto de arte moderno, al que Delia dedica su vida, y carente de calor. Encerrados en su desván en el ático, Adam y Barbara ven el anuncio de un supuesto bioexorcista llamado Bitelchús, que ofrece sus servicios para asustar a los vivos de una casa. En caso de querer sus servicios tendrán que pronunciar su nombre tres veces. Adam lee como pedir ayuda oficial en el manual, y dibuja una puerta en la pared. Al llamar tres veces entran a través de la puerta, mientras Lydia es consciente de todo, pues por alguna razón, es capaz de verles.
Los Maitland llegan a una sala de espera ocupada por otras almas en problemas. La recepcionista les informa que deberán pasar ciento veinticinco años en la casa. La pareja se reúne con Juno, encargada de su caso, pidiéndole ayuda para librarse de los Deetz. Sin embargo, Juno les indica que deben acabar de leer el manual para usar sus habilidades para librarse de dicha familia. 
También les advierte que bajo ningún pretexto llamen a Bitelchús, al que describe como muy peligroso, y que solo se le puede hacer volver pronunciando su nombre tres veces, mismo método que se usa para convocarle. De regreso a casa, Adam y Barbara descubren que Lydia puede verles, pero la joven no está asustada y les advierte que les será muy difícil ahuyentar a su familia de la casa. Sin más opciones, los Maitland deciden convocar a Bitelchús. Sin embargo, tras hablar con él, Bárbara reconsidera su postura al tildar a Bitelchús como un maníaco descontrolado y pervertido. De esta forma, la pareja decide tomar cartas en el asunto y volver a intentarlo su cuenta.
Por la noche, los Deetz invitan a algunos amigos a cenar, entre los que se encuentra el jefe de Delia. Los Maitland deciden poseerles durante la cena y obligarles a bailar calipso. Sin embargo, en lugar de aterrarles consiguen el efecto encantado. Los Deetz y sus invitados se han divertido mucho, por lo que consideran montar un negocio con la casa encantada. 
Lydia es enviada para hablar con la pareja, pero los Maitland se decepcionan al ver que no han logrado asustar y se niegan a hablar con los Deetz. Debido a esto, los Deetz irrumpen en el ático donde Otho encuentra el “Manual Para difuntos Recientes”, y decide llevárselo. Una vez los Deetz abandonan el ático, con la intención de convertir la casa en centro de estudios paranormales, Bitelchús decide pasar a la acción convirtiéndose en una serpiente enorme que les ataca. Lydia queda aterrada, pero Barbara pronuncia el nombre de Bitelchús tres veces obligándole a retirarse. Enfurecido, Bitelchús anuncia su interés en Lydia, y Barbara le advierte que no se acerque a la niña. Bitelchús queda confinado a la maqueta del pueblo, donde acude a un improvisado burdel. Juno convoca los Maitland y les increpa por haber convocado a Bitelchús, haberse dejado fotografiar por Lydia mientras llevaban sabanas, y haber perdido el manual. Tras esto, les exige que consigan solucionar todo.
En la casa, Otho anuncia que Maxie Dean, jefe de Charles, les visitara esa noche y deben estar listos para poder convocar a los fantasmas. 
Esto se debe a que Maxie quiere pruebas de la existencia de los fantasmas. Por su parte, Lydia se ha sumido en una depresión al sentirse sola e incomprendida. Tras escribir una carta de despedida y dispuesta a suicidarse, Lydia la lleva al ático. Allí encuentra a Bitelchús en la maqueta que le pide que pronuncie su nombre tres veces para liberarle. De esta forma la ayudara a morir y convertirse en fantasma. Lydia está a punto de liberarle, pero los Maitland llegan a tiempo para impedírselo. Barbara y Adam hablan con Lydia para que olvide la idea del suicido, comunicándole que han decidido aceptar a su familia y que la joven podrá visitarles siempre que lo desee.
Sin embargo, los invitados de Charles y Delia ya han recibido a sus invitados en la casa, y trasladan la maqueta al comedor. Su idea es convertir el pueblo y la casa en centro turístico, para recaudar grandes cantidades de dinero. Allí, Otho está preparado para usar el manual para convocar a Adam y Barbara a la fuerza, requiriendo solo de un objeto personal. 
Delia le entrega sus trajes de boda, que ha conservado. Otho inicia una ceremonia en la que consigue convocar a los Maitland dentro de sus trajes de boda. Sin embargo, ambos comienzan a pudrirse ya que Otho ha realizado un exorcismo por error. Desesperada y aterrada, Lydia decide invocar a Bitelchús para que salve a la pareja, pero éste exige que a cambio de esto Lydia se case con él. La boda le permitirá residir en el mundo real para poder sembrar el caos a placer. Una vez libre, Bitelchús elimina a los Dean y aterra a Otho que huye despavorido. Liberando a los Maitland del exorcismo, Bitelchús invoca a un decrepito sacerdote para casarse con Lydia, apresando a sus padres. Adam y Barbara comienzan a recuperarse e intentan pronunciar el nombre de Bitelchús tres veces para exiliarle. Sin embargo, Bitelchús envía a Adam a la maqueta y a Barbara al desierto con el gusano gigante. Barbara consigue domar al gusano gigante y regresa a la casa, utilizándolo para que devore a Bitelchús.
Tras la experiencia, los Maitland y los Deetz deciden vivir el harmonía compartiendo la casa. Lydia comienza a encajar y se divierte bailando en el aire gracias a los poderes de los Maitland. Por su parte, Bitelchús ha reaparecido atrapado en la sala de espera del más allá, aunque no ha perdido su peculiar sentido del humor.

ESCENA
Sin duda me quedo con la visita de los Maitland a la sala de espera del más allá, y su encuentro con Juno. ¡Gran escena!

1 comentario:

  1. Cuando era niño yo vi antes la serie de animación antes que la película de hecho ignoraba que existiera la película cuando veía la serie.
    Es curioso lo que son las cosas cuando veía la serie yo quería que hicieran una película con personas reales y al imaginarme quien los interpretaría me imaginaba a Catherine O'hara en el papel de Delia, todo esto sin saber que existía la película.
    Unos años después echaron la película por la tele lo cual fue toda una sorpresa y un descubrimiento para mi, cuando vi la película me gustó mucho y comprendí los cambios que hicieron para la serie ya que en la película Beetlejuice es malo e intenta forzar a Lydia a casarse con él mientras que en la serie Beetlejuice tiene menos maldad que en la película y él y Lydia son muy buenos amigos.
    La película tiene momentos muy buenos y divertidos como la escena de la cena cuando se ponen a cantar y bailar.
    Se ha rumoreado mucho de hacer una segunda parte pero creo que nunca superaría el encanto que tiene esta película.

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